Empezamos por esta sombra por lo que supone de actualidad. Hace unos días los vallisoletanos, y muchos arroyanos, han descubierto que en Arroyo hay un club de Rugby, que se apodan los ornitorrincos, y que afrontan la nueva temporada con la incertidumbre de que, por la dejadez del ayuntamiento, no hay campo.
En la introducción de esta serie de “Las Sombras…” hablamos de la música embriagadora que desde hace años oímos en este pueblo. En ese sentido, los campos de rugby han sido uno de los hits temporada tras temporada. Casi podríamos hablar de la canción del verano. Enumeremos:
Ya en los tiempos previos a la
campaña electoral de 2007, comenzaron a sonar los primeros compases de la
melodía: El alcalde de Arroyo, entonces en el PP, anuncia una ciudad deportiva
del rugby, destinada, en principio, a uno de los dos clubes de Valladolid y a la
federación. El proyecto, tal y como la prensa lo detalló, resultaba impresionante. Estaría situado en Sotoverde y convertiría a Arroyo en el epicentro del
rugby nacional.
Por estas y otras cosas, IPAE, el nuevo partido del antiguo
alcalde, ganó las elecciones de 2007. Del proyecto nunca más se supo. Los
arroyanos, olvidamos lo del rugby y seguimos con nuestra vida. Los arroyanos lo olvidamos, pero IPAE no. Y en las fechas
previas a las elecciones de 2011 volvió a tocar la cancioncita. “En Sotoverde
vamos a hacer unos campos de rugby… “. Los vecinos volvimos a abrir la boca con
asombro, pensando que nos sonaba de algo el ritmillo, pero no acabábamos de
caer. Así que, ni
cortos ni perezosos, IPAE colocó una valla anunciando los campos de rugby en el
solar en cuestión.
Por estas y otras cosas, IPAE ganó de nuevo las elecciones
de 2011. La valla aguantó lluvia viento
y demás inclemencias durante toda la legislatura, para que esta vez a los
vecinos no se nos olvidara, que IPAE, con nuestro dinero, iba a hacer unos
campos de rugby allí. Pasó otra legislatura completa, y llegaron las elecciones de 2015… ¿Y saben lo que llevaba IPAE en el programa de 2015? ¡Efectivamente!
¡unos campos de rugby en Sotoverde!. De aquella ya había nacido el Club de Rugby
Arroyo, los ornitorrincos. Entrenaban en el campo de césped natural de la vega.
Por estas y otras cosas, IPAE ganó de nuevo las elecciones
de 2015. Este que escribe tomó la decisión de participar en política y fue elegido como concejal de Ciudadanos, y a
mediados de 2016 preguntó en un pleno sobre los campos
de rugby que anunciaba la valla del solar de Sotoverde. La respuesta fue que de momento no tocaban. La valla, que iba a cumplir seis años, fue desmontada dos semanas después.
No se vayan todavía, aún hay más: en los presupuestos de
2017 volvió a sonar el mismo tema: “haremos unos campos de rugby en Sotoverde”,
anunció por enésima vez el alcalde. Era un intento por paliar el papelón que el propio alcalde había hecho con el asunto de los bomberos, ya comentado y que será objeto de otra sombra. Poco
duró la esperanza de los ornitorrincos. En febrero de 2017 nos enteramos de que
han incumplido la regla de gasto, de que el presupuesto municipal del año 2016 se ha cerrado con un déficit fiscal real de 2,5 millones, y de que esta vez tampoco va a poder ser.
Campos de Pepe Rojo en Valladolid el 23 de agosto |
Campos de la Vega en Arroyo el 3 de agosto |
Lo demás ya lo saben: Mientras en Valladolid aprovechan junio para arreglar sus campos, en Arroyo, con un campo lleno de agujeros, con roderas de tractor y con 50 lesiones de los usuarios por el mal estado a lo largo del año, el equipo de gobierno municipal pasa el verano tumbado a la sombra y cerquita del botijo. Los niños del club compartirán campo de césped artificial con los dos clubes de fútbol. Si en el pasado ya ha habido problemas por la masificación, imagínense ahora. En cuanto a los mayores les han dicho, literalmente, que se busquen la vida.
Después de diez años oyendo la misma canción, como aficionado al rugby, como padre, y como vecino, considero el asunto
no sólo una tomadura de pelo, (otra más), sino un auténtico drama para este
pueblo, drama que viene además agravado por la situación en que quedan las trescientas almas del Club de Rugby Arroyo. Cuando he llegado al ayuntamiento he podido ver los dinerales que se han tirado en este pueblo en cosas insustanciales, pero mas allá del dinero, el asunto supone un completo insulto a los vecinos y sobre todo a los propios votantes de IPAE.
Obvio decir qué pasará si algún día tengo capacidad de decisión sobre el asunto.
Obvio decir qué pasará si algún día tengo capacidad de decisión sobre el asunto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios