Esta es la historia de unos
campos de rugby que nunca llegaban, y del empujoncito que le dieron desde una diputación,
empujoncito… indirecto. !Ah!, y también hay unos bomberos...
Estamos en Arroyo de la
Encomienda. Nos situamos en los meses previos a las elecciones de 2007. Méndez por
entonces alcalde del PP, anuncia el ambicioso proyecto de un complejo de rugby en Sotoverde,
en colaboración con el club de rugby El Salvador, que sería el usuario final de
la instalación. En aquellos días pudimos ver una bonita infografía que casi
dejaba pequeño Twickenham, les pongo una foto, para que vean la catedral del rugby mundial. Luego vino la
imputación por corrupción, la creación de IPAE, que ganó las elecciones y la
caída en el olvido del proyecto.
Cuatro años después, vuelta la
burra al trigo. Antes de las elecciones Méndez vuelve a anunciar un fantástico
complejo en Sotoverde, con campos de rugby y polideportivo. IPAE volvió a ganar
las elecciones y puso una bonita valla publicitaria en lo que iba a ser la
ubicación de los campos. Para que todo el mundo viera que tenían la firme
intención de hacerlos.
Volvieron a pasar otros cuatro
años, la valla aguantó estoicamente lluvia y viento y llegó 2015 y unas nuevas
elecciones. Con la nueva legislatura entra C´s en el ayuntamiento, y el
portavoz de C´s, éste que les escribe, con toda la candidez del mundo pregunta
en un pleno si alguien tiene algún plan respecto a las prometidas pistas
deportivas de Sotoverde, y recuerda que hay un cartel conmemorativo de la
promesa.
El nuevo alcalde, José Manuel
Barrio, - Méndez ya estaba en la cárcel- dice que estaban previstas, pero que
dependían de que se vendieran unas parcelas industriales en el polígono… si,
ese que tenemos para criar perdices… y que al no venderse, no hay dinero y sin
dinero no hay campos. Una semana después la valla es desmontada. Nadie quería
al mudo testigo de las promesas incumplidas.
Pero hete aquí que llegó la
diputación. ¡Que importantes son las diputaciones! En octubre de 2016 se
mosquea con el ayuntamiento de Valladolid diciendo que no quiere pagar los
700.000 € que Valladolid le pide por los bomberos y amenaza con hacer un parque
propio en Arroyo. El alcalde de Arroyo, solícito con su socio de gobierno, el
PP, se ofrece a pagar la ronda con el dinero de los arroyanos, y todos
contentos. Al PP le importa un pepino duplicar servicios siempre que sea él
quien los gestione, el alcalde de Arroyo se pone la medallita de mejor amigo
del presidente de la diputación, y los vecinos de Arroyo se hacen con una mierda
de parque con un camión y cuatro bomberos de servicio al módico precio de 3
millones de €uros a pagar a escote por todos los arroyanos -y a compartir con
todos los del alfoz- en lugar del magnífico servicio de 6 camiones y 26
bomberos de servicio del que disponían hasta ahora.
El plan era perfecto. Como el
dinero público no es de nadie, no importa tirarlo en caprichitos, pero hete
aquí que se empieza a conocer que el servicio va a ser mucho peor que el que
había, y el presidente de la diputación atisba que puede perder la votación y
ser rechazada la propuesta. Así que dos días antes de que se votara en el pleno, le dice al
alcalde de Valladolid que donde ponía 700 ponga 600 y que lo firman. Así se
hace, y dejan al alcalde de Arroyo con el molde y con la vergüenza de haber
jugado con el dinero y la seguridad de sus vecinos. Así que al alcalde le toca pensar, y piensa…
Y piensa y decide que tiene que
dar un golpe de efecto que desvíe la atención del papelón que ha hecho, piensa
y… ¡se le enciende la bombillita! - ¿Qué hay de los campos de rugby que
anunciamos hace años? ¿Podemos hacerlos?. – Le hemos dicho al de Ciudadanos que
no había dinero, le dicen sus acólitos. – Eso es igual. Hay que lanzarlo para
que vean lo buenos que somos y cómo miramos por el pueblo (y para que nadie se
acuerde de como ha jugado con el dinero y la seguridad de los vecinos, y como
mintió, cuando dijo que no había dinero, añadimos algunos)
Y aquí están, anunciando los
nuevos campos de rugby. Desde C´s tenemos que decir que es la vez que más
utilidad le hemos visto a la Diputación. Si no es por ella y por el ridículo
que le ha hecho hacer al alcalde, nadie se hubiera acordado de los campos de
rugby. Como dice una concejala de IPAE, “la administración escribe con
renglones torcidos”. Bien está lo que bien acaba, y personalmente estoy
encantado de que se retome el proyecto, porque lo veo necesario y bueno para
los vecinos. No estoy de acuerdo con que se comparta con el fútbol, porque
mezclar deportes son líos, pero eso lo contaremos en otra ocasión.
Rafael Velasco
Portavoz de C´s en el
ayuntamiento de Arroyo de la Encomienda
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